Personas con una pedofilia se sienten atraídos sexualmente por niños con un cuerpo pre-puberal (p. ej. Falta de vello púbico o en el sobaco, vagina pequeña o pene pequeño, antes del desarrollo de pechos) que en general no son mayores de 11 años. Los afectados pueden sentirse atraídos por cuerpos infantiles de niñas tanto como de niños.
Personas con una hebefilia se sienten atraídos sexualmente por niños, cuyo desarrollo corporal ya muestra características de pubertad (p.ej. poco vello púbico y/o de sobaco, vagina poco desarrolada, pene poco desarrollado, forma de la mama en desarrollo).
Hay personas que sufren mucho bajo su preferencia sexual.
Al tener en cuenta determinadas conductas sexuales, algunas personas afectadas logran dejar sus impulsos sexuales a un nivel de fantasía durante toda su vida. Por lo tanto, los términos pedofilia y hebefilia no son equiparables con abuso sexual infantil o explotación sexual mediante el consumo de imágenes que muestran abusos sexuales de niños.